Apuntes sobre Sartre


1 Lo primero que nos revela la vida de Jean-Paul Sartre, además de la libertad del hombre y de su capacidad creativa, es la necesidad existencial de la escritura. El acto de escribir no sería un oficio ni una impostura, sino una necesidad vital que se desarrolla en la (inútil) carrera contra el tiempo que transita el hombre arrojado (o “eyectado” si se prefiere una palabra heideggeriana) al mundo.

¿Acaso el vacío del hombre o, mejor dicho, la “nada” del sujeto que llamamos “hombre” se llenaba en el caso de Sartre con la escritura?

2 Con la lectura de Donnés inmediates de la conciencie de Bergson, Sartre descubre la filosofía. (1924).

3 Escribe a los 21 años: “Es la paradoja del espíritu que el hombre, cuyo trabajo es crear lo necesario, no pueda elevarse así mismo hasta el nivel del ser, como esos adivinos que predicen el porvenir de los demás pero no para sí mismos. Por eso, en el fondo del ser humano, como en el fondo de la naturaleza, veo la tristeza y el aburrimiento... Somos tan libres como se quiera, pero impotentes... Pero lo demás, la voluntad de poder, la acción, la vida, no son más que vanas ideologías. En ninguna parte hay voluntad de poder. Todo es demasiado débil: todas las cosas tienden hacia la muerte. La aventura, sobre todo, un engaño, es decir, esa creencia en conexiones necesarias que sin embargo existirían. El aventurero es un determinista consecuente que se supone libre. Somos desgraciados, pero más simpáticos”.

Estas palabras del joven Sartre, manifiestan el pensamiento de que la conciencia de finitud propia del hombre moderno es lo que lleva a ver al mundo como una cosa fútil y con poco sentido.

4 Conoce a Simone de Beauvoir (desde aquí El Castor). Jean-Paul impone sus leyes a la relación que mantendrá con el Castor: los viajes, la poligamia, la transparencia. La relación dura 51 años, cuando él muere.

Se tratan de usted.

5 Raymond Aron le trae noticias sobre la filosofía alemana. Lee la Théorie de l´intuition dans la phénomenologie de Edmund Husserl. En esa misma época escribe y rescribe lo que será La nausea.

1 comentario:

Esteban Valesi dijo...

Este primer Sartre que relatás parece inundado de un tedium vitae, casi baudelaireano.

Me gusta más el segundo Sartre, comprometido y contradictorio.

El autor de Los caminos de la Libertad, antes que el de La Náusea.

Saludos.