La música en los otros


Cuando cae la tarde me da por escribir. Pasa lo que tiene que pasar; me recuesto en la silla, hago que prendo un cigarrillo y comienzo con la escritura. Al principio, la escena la imagino ideal: un hombre caminando lento en medio de una lluvia torrencial, los amantes secretos que se despiden en un andén lejano, la descripción de un hombre que ha sido. Luego me quedo largo rato preguntándome quién es ese tipo que camina bajo la lluvia, por qué los amantes esconden su amor, qué le ha pasado a esa sombra de hombre.

Al otro día releo lo escrito y todo va a parar a la basura. Es una forma absurda de acercamiento a Kafka, me digo. También me pregunto a dónde van a parar los papeles que uno ha escrito, los que ha perdido o los que se ha llevado una amante. Sólo pueden quedar en el recuerdo del escritor o del ocasional lector. Soriano ya lo había dicho alguna vez, "somos músicas que quedan en los otros".

2 comentarios:

alejandra dijo...

hola juan!!, gracias por el coment sos de tres arroyos que le mandas saludos???je,je
saludos,
ale

barbarroja dijo...

desde el otro ladito del mar

pantera rosa, aprendiz de brujo, avispa, orquídea y pirata

sí, eso decía un poeta

"ya que hemos de morir
y que el morir será como un adiós
será la cuestión
de quién nos despediremos
y qué
nos diremos al fin"

(te encontré con el 8ymedio
y me gustó lo que perdí al encontrarte)